Mi historia contada por mi amigo Maikel

Y cuando llegaba de pillar unas cervezas, esperaba que secestuvieran enrollando, o bien charlando desnudas, o qué se yo..Pero cuál fue mi sorpresa...¿ Qué os imagináis? Pues que estaban las dos allí hablando en mi sofá. Ese que tiene dos plazas. Ya ves: cuando llego yo, con las cervezas, mi historia era: qué hago yo ahora.

Pues nada: pregunto a ver quién quiere una cerveza. Las dos al unísono con el dedo levantado dicen: YOOOOO!!

Ok.

Pues nada: Allá voy yo con mis tres cervezas al sofá y digo: ¿ Qué. Dóndeme pongo yo! Pues búscate la vida dice la Serita. Bueno pues me buscaré la vida. Me pongo un cojín en el suelo y allá voy, al suelo. Con el culo frío mirando esas cuatro hermosas tetas que bailaban al son de las palabras que decían las susodichas que estaban con dos de mis camisetas favoritas, sentadas en ese mi sofá de dos plazas. Y Decían cosas como “mi trabajo me mata porque me aburro todo el día”. Ejem....Creo que quieren seguir follando. Pues nada. Digo: Ei! Chicas! Vamos a cambiar de musiquilla eh? Pongo Lenny. Todo se arregla. Me hago un huequito en el sofá, y empiezo a decirle a Sira que me estoy empezando a poner cachondo. Que con dos chicas guapas como ellas allí, cómo iba yo a desperdiciar mi tiempo poniendo música. La música ya estaba puesta. Los tres medio borrachos; y empiezo a respirar sigilosamente en el cuello de Sira. Ella sigue hablando pero yo noto como su cuello se eriza, y se empieza a mover sigilosamente en el sofá, como si quisiese algo de él. Mientras, Rubia, seguíacontando sus historias pero hablando cada vez más despacio, como si lo quedijera se lo estuviese contando al aire. Sin embargo cuando me doy cuenta,Rubia tiene su mano en la parte interna del muslo de Sira, mientras yo seguíanotando la piel de su cuello erizada. No se me ocurre otra cosa que extender mimano izquierda y empezar a notar lacintura de Rubia y su movimiento medio convulsivo hacia delante. Parece que está todo claro. Así que: como Rubia es muy concisa dice: ¿Qué coño hacemos aquí vestidos?: Nos vamos a desnudar y seguir charlando tranquilitos en la cama. Yo pensando para mi “síiiiiiiiii” Vamos. Allá nos ponemos los tres en pié, y empezamos a quitarnos la ropa; y yo el primero, me acerco a la cama, que estaba a una puerta de distancia y atrapo la mano de Sira para que me acompañe, y con un gesto que entiende a la primera me hace caso y coge de su mano a Rubia y la arrastra hacia nosotros.Cuando estábamos a los pies de la cama ya solo nos faltaban los calcetines o algún complemento a todos. En el momento en el que tenía a cada una agarrada por su mano, tiro de mis brazos para acercarlas. A Sira aún le faltaba retirar sus medias, por lo que la agarré de los dos brazos, la puse de espaldas a la cama, y con un guiño a Rubia la tumbamos. Entre los dos fuimos retirando esaslargas medias, poco a poco, mientras ella se quería contonear y ponerse bocaabajo. Yo la ayudé, y acabó boca abajo. Esa fue su perdición porque una vez que Sira y yo habíamos conseguido retirarle sus medias, comenzamos, cada uno con sumano, a acariciar sus piernas, despacio, lentamente, hacia arriba. Yo ya estabaempalmado como un burro, pero aún no me había quitado el gallumbo y mi pantalón estaba por los pies.

Bueno, os contaré el siguiente capítulo otro día, que ahora tengo que trabajar